Flick Club LogoFlick Club Logo
Medicina Psicología Viajes

“Cuánta curiosidad despierta en el lector el relato, con un suspenso cautivante, titulado “Tic tac, tic tac”.

“Con reminiscencias de un pasado de rebeldía que hoy percibe como pesadillas, literariamente se aproxima a una atmósfera kafkiana: cambiante, aunque no absurda, sí angustiante, fantasmagórica, pero ciertamente opresiva, tanto que deviene en pesadillas.

“Aguas de marzo”, magnífica simbiosis literaria entre narrar vivencias gratificantes y engarzarlas con una seria advertencia sobre el flagelo del sida. Sin abandonar, sin embargo, ese halo de sensualidad y erotismo que pincela todo el relato y que se visualiza al imaginarnos a Magaly, seduciendo con su cuerpo y con su voz.

“No sólo eso, hay astucia narrativa en un plano biespacial, aunque no bitemporal, en la descripción del avance inexorable y microscópico de los causantes de la tragedia del siglo. El virus “necio” ─según explicación personal de Joseph─ ya que termina matando a su anfitrión al hacer ineficiente su sistema inmunológico, como ocurre con Patricio.” Así, con una imaginación y fantasía desbordantes, aprovisionada por mil recuerdos de situaciones reales y sostenida fuertemente con rigurosidad científica y sabiduría humana, Joseph nos entrega su regalo.

Santiago, Chile Enero 2010

Gustavo Querelle R. Periodista