En este libro el autor se remonta a los orígenes de las ideas existentes en la antigüedad para la organización de un Estado democrático; y revela como la carencia de muchas de las ideas e instituciones allí descriptas, hacen que nuestros Estados presenten deficiencias estructurales en su organización política, en su sistema electivo, en el quehacer del hombre, en la distribución de la riqueza y el poder, y sobre todo, en una educación que permita el desarrollo de todo el potencial singular del hombre en cada hombre.