Vivienda Rural

Es notoria la creencia de que el mejoramiento de la vivienda rural se produce simultáneamente con el progreso económico, lo cual es un error. Ese mejoramiento debe ser planificado y programado con la participación activa del campesino, como resultado de un proceso educativo que lo lleve al cambio de actitudes y a la comprensión de necesidades muy sentidas. Esta segunda edición de Vivienda rural: un desarrollo integral ha sido ampliada con toda la información sobre las últimas disposiciones del gobierno en relación con la vivienda de interés social. Todos los colombianos tienen derecho a vivienda digna. El Estado fijará las condiciones necesarias para hacer efectivo este derecho y promoverá planes de interés social, sistemas adecuados de financiación a largo plazo y formas asociativas de ejecución de estos programas de vivienda" (Constitución Nacional, capítulo 2, artículo 51). Las leyes 2 y 3 y el decreto reglamentario 599 de 1991 modificaron toda la política de vivienda, mediante la creación del sistema de vivienda de interés social, a través del cual se establecen los mecanismos para dotar de vivienda a los colombianos más pobres, otorgándoles un subsidio para la adquisición de su vivienda. Los recursos destinados a la vivienda rural, muy significativos pero que tienen carácter transitorio, deben reorientarse mejor, ya que este programa prácticamente no ha podido despegar en forma.Programas como los de vivienda productiva y vivienda hospedaje pueden representar una buena inversión en la utilización del subsidio de vivienda y en los planes de vivienda rural o urbana, ya que conducen al impulso de la microempresa y el turismo. Bogotá, agosto de 1992